UNDERTALE, o la perfección hecha videojuego.
En fin, digo yo que ya tocaba una entrada seria, no? Para inaugurar este reino de lo estúpido, empezamos hablando de uno de mis juego favoritos hasta la fecha: UNDERTALE.
Antes de comenzar, debo destacar el hecho de que se pueden incluir unos spoilers bien bonicos, así que si quieres entrar virgen al maravilloso inframundo donde tiene lugar esta obra de arte, recomiendo que solo veas la reseña objetiva, y abandones la parte donde empiezo a desvariar… lo dejaré bien claro, vale?
Undertale es un juego indie RPG creado este mismo año, lanzado el 15 de Septiembre de la mano de Toby Fox, un diseñador indie de videojuegos que por lo que se ve hizo un hack el mítico Earthbound de NES (Lo cual se gana parte de mi respeto). La trama principal no es muy complicada: Eres un/a humano/a (Nunca se ve claro el sexo) que cae a un agujero en un monte donde se supone que está la entrada al reino de los monstruos, los cuales fueron exiliados allí tras una guerra que terminó con una paz que se creía prospera. El factor único de este juego es el menú de opciones de las batallas porque claro, es un RPG. Están las opciones FIGHT (luchar), ITEMS (objetos), FLEE (Salir por patas)… pero hay dos menús añadidos: ACT y MERCY. Este maravilloso juego nos ofrece la posibilidad de NO matar a un enemigo, sino de interactuar con él y más importante aún, perdonarle la vida…
Para finalizar esta parte objetiva, que menos que un pequeño trailer del juego (el cual se hace cortísimo una vez juegas al mismo)
Pasemos ya a la parte subjetiva, y repito, no voy a cortarme a la hora de destripar la historia y todo eso… Si te fastidia, pues ya sabes, «ajo y agua», que ya lo he avisado un par de veces.
Quizás te eche para atrás el hecho de que al principio los sprites son una basura inmensa (Creedme, justo eso pensaba yo antes), pero luego admiras la belleza de todos los ambientes, personajes, e incluso ataques! Aparte del sistema de perdonar a los enemigos, lo cual me pone palote, lo que más adoro del juego es el método para esquivar a los enemigos: Eso de mover un corazoncito rojo por un cuadro te da infinidad de posibilidades para crear todo tipo de variopintos ataques. También es vital el carácter de los personajes y como se complementan entre sí…
Un buen ejemplo de esto son Sans y Papyrus, los hermanos esqueletos. Sans básicamente es un coñero, que a cada oportunidad que tiene gasta una bromita de esas que se te quedan en la cabeza y son guays, mientras que Papyrus es un tipo que se hace el típico serio malote cuando en realidad es un cacho pan. También forman la pareja cómica por excelencia, aunque esto os lo dejo para que lo miréis vosotros porque no tiene desperdicio…
Otro rasgo precioso es el… espera, no, no… los finales. Al tener la oportunidad de matar o dejar vivir a la peña, hay una infinidad de finales desorbitante, los cuales están planeados perfectamente por el autor.
Esta obra maestra destroza todos los estándares que hay sobre los videojuegos y te sitúa en un mundo en el es «matar, o morir». La pregunta es: Serás capaz de resistirte a darle la razón?